Las
celebraciones navideñas en la Catedral presididas por Mons Munilla y otras iniciativas diocesanas han contado con
la participación de personas muy variadas y de diversas edades la úlima semana de diciembre y el 1 de
enero.
Pueden
seguirse en estos enlaces:
Homilía de la Misa del
Gallo:
Presentación de la Jornada
de la Familia por el Diácono Permanente Mikel Iraundegi
Homilía de Mons Munilla en
el Domingo de la Sagrada Familia¨
Homilía y Bendición de
Mons. Munilla con motivo del Fin de Año
Homilía del Obispo de San Sebastián-Donostia el 1 de enero:
Solemnidad de Santa María Madre de Dios
Unos días de Antes, con motivo de la Fiesta de los santos Inocentes, mons. Munilla publicó un artículo donde se ofrecen tres propuestas de ayuda a la protección de la vida del nasciturus y de las madres en dificultades. Por su interés y actualidad se reproduce a continuación:
Santos
inocentes
Entre todos los
escaños electos en las elecciones del 20 de diciembre para el nuevo Congreso de
los Diputados, por el momento no consta que haya ni un solo parlamentario que
defienda públicamente la tutela del derecho a la vida humana desde el momento
de su concepción hasta la muerte natural. Es la primera vez que se produce
semejante escenario en la vida política española. A pesar de que los escaños
parlamentarios están llamados a reflejar la diversidad de posicionamientos existentes
en una sociedad plural, en la actualidad no existe un partido político con
representación parlamentaria que defienda la convicción sostenida por una parte
importante de la población, en materia de familia y vida.
Este dato es
especialmente llamativo, en el momento en que la clase política se enfrenta
ante la dificultad de conformar un gobierno, por motivo de la existencia del
mapa parlamentario más fragmentado de la historia de la democracia en España. Paradójicamente,
nunca como ahora los partidos políticos habían comulgado sin fisuras con el
pensamiento único de la ideología de género, y nunca como ahora se habían
encontrado con una dificultad tan grande para ponerse de acuerdo en el
ejercicio del poder político. La conclusión es bastante clara: del pensamiento
único no se desprende una mayor facilidad para la acción política conjunta. Y
no es difícil entrever que la explicación de este hecho tiene mucho que ver con
la lógica del poder.
Pero pienso que
debemos buscar una causa más de fondo a este fenómeno. Cuando la acción
política deja de respetar la ley natural y ya no cree en ella, el concepto de
“bien común” es sustituido por el de “interés general”. Aunque a simple vista
pudieran parecer dos términos sinónimos, en realidad, existe un triple salto
mortal entre el primero y el segundo. Del “bien común” nadie puede quedar
excluido: ni las minorías, ni los más débiles. La justicia es buena para todos:
Lo que es verdaderamente bueno para mí, no puede ser malo para el otro; y lo
que es malo para el otro, no puede ser bueno para mí. Sin embargo, cuando la
política no parte de un concepto de justicia insertada en una ley natural, se
limita a invocar el “interés general”.
Desgraciadamente, la
experiencia nos dice que tras el “interés general” se esconde una lucha de
intereses “particulares”, en la que siempre tiene las de perder el más débil.
En el caso que nos ocupa, la vida de los “inocentes” concebidos y no nacidos…
En la lógica de la ideología de género, el derecho de la mujer a decidir, puede
estar en contraposición con el derecho a la vida del nasciturus. Si negamos el “bien
común”, solo cabe el “interés general”; que obviamente, ya sabemos cuál es: el
del más fuerte.
A la luz de esta
reflexión, quizás podamos entender los motivos de la dificultad en conformar un
gobierno en España, a pesar de la gran similitud ideológica en el fragmentado
arco parlamentario. Cuando no se cree en el “bien común”, es muy difícil
procurar el “interés general”, por no decir que es imposible; ya que la lógica
del poder termina por fagocitar la dinámica de la vida política.
Ahora bien, la batalla
por la defensa de vida humana más débil, no se juega exclusivamente en las
leyes. Esta semana hemos conocido las estadísticas de aborto del año 2014, en las
que se ha conseguido un muy notable descenso del 12’8% en el número de abortos
provocados, con respecto al año anterior. De los 109.690 abortos en 2013, se ha
pasado a 94.796 en 2014. Una vez más, se demuestra algo que ha sido una
constante en España desde la primera ley de despenalización en el año 1985:
cada vez que en España se reabre el debate social sobre el aborto, disminuyen
el número de abortos. Cuando deja de debatirse, aumentan. De lo cual se
desprende que, a pesar de que en la legislatura que se inicia no quepa esperar
iniciativa política alguna en favor de la defensa de la vida humana, es muy
importante mantener encendido el debate social sobre el aborto.
Pienso que la causa
provida tiene en este momento tres frentes: El primero es el de iluminar las
conciencias, frente a la tentación del pensamiento único. No en vano, dice el
proverbio: “Donde todos piensan igual,
nadie piensa mucho”. Es importante poner en evidencia la contradicción
existente en los valores éticos de nuestra sociedad. Como dice el Papa
Francisco en su última encíclica ecológica Laudato Si: “Es incompatible la defensa de la naturaleza con la justificación del
aborto” (nº 120). En el contexto del relativismo políticamente correcto,
encontramos cajetillas de tabaco con el siguiente anuncio: “Las autoridades sanitarias advierten: fumar
durante el embarazo perjudica la salud de su hijo”. Y paralelamente, la
ideología de género se niega a dar el estatus de “hijo” al “embarazo no
deseado”. Si es deseado es “alguien”, de lo contrario solo será “algo”.
Además de la
iluminación de las conciencias, en segundo lugar se requiere una implicación
muy directa y comprometida en la ayuda a las mujeres embarazadas en situaciones
de riesgo. Estoy convencido de que tras esa disminución del número de abortos
del año pasado, se esconde también la implicación solidaria de muchas personas
anónimas, con las mujeres que han tenido un embarazo inesperado en situaciones
difíciles. El compromiso provida es por la madre y por el hijo al mismo tiempo.
Precisamente, porque se trata de un “bien común”, y no de un “interés general”.
Y por último, la
invitación el Papa Francisco a pasar por la “puerta de la misericordia” a cuantos
se vieron implicados en el aborto. La oferta de este perdón no tiene nada que
ver con una relativización del mal cometido, cuanto con la proclamación de la
misericordia infinita de Dios, capaz de sanar y rehacer la historia de nuestra
vida. De hecho, quienes experimentan esta misericordia, llegan a convertirse en
testigos privilegiados de la dignidad de la vida humana.
Haurtxo errugabeko Santuak
Abenduaren 20an
aukeratu ditugun Diputatuen Kongresuko kide guztien artean, ez dugu oraingoz
ezagutzen sorkuntzatik hasi eta heriotza naturalera bitartean bizitzaren
eskubidearen babesaren alde publikoki egin duenik. Espainiako politikaren
historian ez dugu lehenago horrelakorik ikusi. Parlamentuko eserlekuek ustez
gizarte anitzaren ikuspegi eta iritzi ezberdinak isolatzen dituzte baina hala
ere, egun ez dago Kongresuko alderdi politikoen artean familiaren eta
bizitzaren alorrean herritar askok defendatzen duten uste osoa babesten duenik.
Eta hau bereziki
deigarria da, Espainiako demokraziaren historian izan den parlamenturik
askotarikoena eta zatituena
dugularik. Eta hona hemen kontraesan
galanta: gobernua osatzeko ados jartzea inoiz baino zailagoa izango den
bitartean, alderdi politiko guztiak bat datoz genero ideologiaren pentsamolde
bakarrarekin. Honek argi uzten du pentsamolde bakarrak ez duela errazten
ekintza politiko bateratua. Eta bestalde, honek guztiak zerikusi handia du
boterearen logikarekin.
Areago, fenomeno honen
arrazoia ulertzeko sustraira jo behar dugula uste dut. Izan ere, jarduera
politikoak lege naturala errespetatzeari uzten dionean eta hartan sinesteari
uzten dionean, “guztien ongia” desagertu eta “interes orokorra” gailentzen da. Eta itxura batean biak berdinak badirudite
ere, egiaz alde handia dago lehenaren eta bigarrenaren artean. “Guztien ongiak”
ez du inor baztertzen: ez gutxiengoa, ez eta ahulenak ere. Justizia denentzat
da onuragarria: Niretzat ona dena, ezin da bestearentzat txarra izan; eta
bestearentzat txarra dena ezin da niretzat ona izan. Baina politika lege
naturalean itsatsitako justiziatik kanpo gelditzen denean, “interes orokorra”
aldarrikatu baino ez du egiten.
Tamalez esperientziak
erakutsi digu “interes orokorraren” atzean interes “partikular” ezberdin
askoren borroka ezkutatzen dela; eta borroka horretan ahulena da beti
galtzaile. Jaiogabeko “errugabekoen” bizitzari dagokionez, … Genero
ideologiaren logikaren arabera, emakumearen erabakitzeko eskubidea eta nasciturusaren
eskubidea kontrajarriak dira. “Guztien ongia” ukatzen badugu, “interes
orokorra” nagusitzen da eta hori, indartsuenaren interesa baino ez da.
Azalpen honek ondo
asko azaltzen du arku parlamentario zatitu horrek ideologia berdintsua izan
arren, Espainiako gobernu berria
osatzeko izango duen zailtasuna. “Guztien ongian” sinesten ez denean, “interes
orokorra” lortzea oso zaila, ia ezinezkoa da; boterearen logikak bizitza
politikoaren dinamika osoa jaten duelako.
Baina ahulenaren
bizitzaren aldeko borroka ez da bakarrik legeen alorrera mugatzen. Aste honetan
bertan 2014ko abortuaren inguruko datuak ezagutu ditugu eta aurreko urtearekin
alderatuta, eragindako abortuak % 12’8 jaitsi dira. 2013an 109.690 abortu egin
ziren Estatuan eta 2014an 94.796. Honek berriz ere erakusten digu 1985ean
Espainian abortua legeztatzeko egin zen lehen legea onartu zenetik hona
nabarmena dena: gizartean abortuaren inguruko eztabaida pizten den bakoitzean,
abortu kopuruak behera egiten duela. Eta alderantziz, eztabaida itzaltzen
denan, gora egiten du. Hartaz, hastera doan legealdian giza-bizitzaren aldeko
ekimen politikorik itxaron behar ez badugu ere, oinarrizkoa dugu gizartean
abortuaren inguruko eztabaidari eustea.
Bizitzaren aldeko
(Provida) taldeek hiru fronte ezberdinetan aritzea ezinbestekoa dute egun:
hasteko eta behin pentsamendu bakarraren tentaldiaren aurrean, kontzientziak
argitu behar ditu. Esaera zaharrak dion
moduan, “Guztiek berdin pentsatzen duten lekuan, inork ez du askorik
pentsatzen”. Oinarrizkoa dugu gizartearen balore etikoak nabarmendu eta
azpimarratzea. Frantzisko Aita Santuak Laudato Si` azken entziklikan dion
moduan: “Bateraezinak dira naturaren defentsa eta abortuaren justifikazioa”
(120 zenb.). Politikoki zuzena denaren ingurugiro honetan zigarro paketetan
ondorengo goiburua ikusten dugu “Osasun arduradunen oharra: haurdunaldian
erretzea zure semearen osasunarentzat kaltegarria da”. Baina aldi berean,
ideologia generoak “nahi gabeko haurduntza” “seme edo alaba” denik ukatzen du.
Desiratutakoa “norbait” da, nahi gabekoa,
“zerbait”.
Kontzientziak
argitzeaz gainera, bizitzaren aldeko taldeek zeregin handia dute arrisku
egoeran dauden emakumeak laguntzen eta babesten. Seguru nago, iaz izandako abortu kopuruaren
jaistearen atzean, egoera larrian dauden emakume haurdunei laguntza eskaini
dieten hainbat eta hainbat pertsona daudela. Bizitzaren aldeko konpromisoa
amaren eta haurraren aldekoa da aldi berean. Hain zuzen, “guztien ongiaz”
kezkatzen delako eta ez “interes orokorraz”.
Azkenik, abortuarekin
zerikusia izan duen oro “errukiaren atetik” igarotzeko Frantzisko Aita Santuak
egindako gonbidapena ezin ahaztu. Barkamen eskaintza hau ez da egindako
kalteari garrantzia kendu diolako; alderantziz, gure bizitzaren historia
sendatu eta berregiteko gai den Jainkoaren erruki amaigabearekin bat dator.
Izan ere, erruki hau bizi dutenek giza- bizitzaren duintasunaren aldeko lekuko
eta igorle paregabe bihurtzen dira.
Informó: Rafael Hernández Urigüen Redactor de Palabra en Donostia
San Sebastián. Textos y enlaces facilitados por la Delegación de MCS de la
Diócesis. Imagen: Rafael Hernández Urigüen
No hay comentarios:
Publicar un comentario